En esta época, debido a la innumerable cantidad de situaciones a las que la mayoría de las personas viven sometidos a diario en las grandes ciudades, todos deberían consultar a un quiropráctico periódicamente. Unos ajustes delicados y profesionales en la espalda pueden remover un sinfín de malestares físicos y psicológicos del organismo.

Y de manera particular, toda persona que sufre un accidente automovilístico, independientemente de su magnitud y de cómo se sienta necesita de terapia quiropráctica para:

1. Diagnosticar una lesión no manifestada: mucha gente cree que si no hay un malestar agudo todo está bien; pero un trauma pequeño genera un dolor suave mientras no se empeore. El punto es que usted no tiene idea de cuan afectado quedó por el impacto.
2. Prevenir daños a largo plazo: el movimiento brusco de la colisión muchas veces es responsable del llamado whiplash o latigazo cervical. Si no se trata a tiempo, usted podría perder funcionalidad en la zona superior del cuerpo e incluso enfrentar complicaciones graves de salud.
3. Atender el origen del problema y no solo la sintomatología: cualquier médico ante un caso de dolor crónico recetará calmantes que únicamente proporcionan alivio momentáneo. Sin embargo, la búsqueda de una solución permanente pasa por encontrar la causa subyacente y corregirla.
4. Evitar tratamientos invasivos y peligrosos: con moderados ajustes de la columna vertebral, sin necesidad de procedimientos quirúrgicos ni otras técnicas agresivas, el quiropráctico le devolverá a su condición inicial y le proporcionará calidad de vida después de sufrir un accidente vehicular (auto accident).

Beneficios para todos

Por otro lado, estas técnicas retardan el envejecimiento porque ralentizan el daño celular y fortalecen los sistemas neurológico, inmunológico y endocrino. Mejoran la elasticidad y tonicidad de la piel, aumentando la velocidad de cicatrización. Incrementan el rendimiento físico, la autoinmunidad y la respuesta sexual. Favorecen los procesos mentales y el bienestar general.

En resumen, el cuidado quiropráctico fortalece la resistencia natural del organismo, subsanando la tendencia a enfermar. No se limita a víctimas de accidentes ni a determinadas condiciones, sino que es útil a niños, jóvenes, adultos y ancianos, por igual; sin importar sus síntomas o estado de salud físico ni mental.