La tecnología no sólo ha cambiado nuestras formas de trabajo, sino también nuestras formas de relación, tanto social como laboral.
Con cada propuesta, la respuesta masiva ofrece la impresión que ya no hay más nada que crear, que está todo hecho y que se concentra en unos pocos métodos y actividades.
Pero, sin que pase mucho suele aparecer otro producto y otro más, que comienza la pelea por captar usuarios.
De este modo, los usuarios, se suman a cada propuesta, según un patrón que no es posible comprender, de manera que el éxito o el fracaso tienen iguales probabilidades.
Es histórico la cantidad de aplicaciones propuestas por Google, que no han sido tomados por el público, o que no han tenido tanto éxito como otros de su mismo tenor.
Google+ es uno de ellos, por más que pretende competir con facebook, no logra su éxito, en una breve encuesta entre los usuarios, algunas de las razones importantes son que Google+ es restrictivo, promueve un me gusta más complicado que uno simple de facebook, y requiere algo que ya se hico en facebook, buscar amigos, seguidores, etc.
El encontrar seguidores es el punto fuerte de Twiter, el hecho de precisamente, no hay que buscarlos, ellos nos encuentran, de modo que el uso es mucho más libre.
En preferencia de usuario, twitter, facebook y Google+, parece ser la norma.
Mientras, linkedin, un red social que apunta a los profesionales, logra diferenciarse por ser un medio para desarrollar contactos de trabajo y ofertas de empleos, además de artículos y notas, siendo éste último una actividad que también se puede realizar en facebook, pero menos usadas.
Luego está Pinterest, una red poco conocida por estas geografías, pero bastante usadas, con algunas diferenciaciones, llegada en 2011, nuevísima, intenta cubrir un segmento puramente visual.
Si algo hay que analizar de la diferencia entre Twitter y facebook es que con tanta oferta y actividad, los usuarios ejercitan el ingenio de cada vez de decir o expresar más con menos. La restricción de cantidad de caracteres en Twitter, que algunos auguraron como sin sentido o fracaso, vino a develar que astutamente alguien comprendió que lo que ya estaba pasando con los SMS de los celulares, podía convertirse en masivo: reducir los mensajes, contestar una sola pregunta: qué estás haciendo, que la mayoría traduce como: qué estás pensando.
El Pinterest es principalmente visual, reinterpreta el interés de los usuarios y considera que la expresión escrita está agotada y apunta a lo visual.
Se incluyen imágenes en diferentes carpetas, y se llama Pinear a la actividad de intercambiarlas con otros usuarios, a los que como en Twitter, no es necesario buscar, ellos nos pueden encontrar y seguir. En vez de retwitear, se repinea, es decir, se envía la imagen a cualquiera a nuestro tablero, que será visto por nuestros seguidores.
Los contenidos se pueden ver, aún cuando no estemos siguiendo a nadie, de manera que vagar por la red es una de las actividades que más se estimulan, más incluso que el intercambio social mismo, como una suerte de modalidad de exhibición de gustos y elecciones.
Una nota de color, revelada por la propia Pinterest es que el 80% de sus usuarios son mujeres, por lo que la moda es uno de los ítems principales e ideal para el que busca un público femenino.
Como vemos, hay en cada una un componente útil para cualquier estrategia comercial, y en cada caso, hay algún detalle que convierte la propuesta en masiva.
Todos estos medios vinieron a competir con los blogs, que dejaron de ser los reyes de la Internet, su facilidad de uso fue una ventaja, pero en su concepción y uso comercial, hay mucho por esperar de ellos, como por ejemplo, el hecho de no poder reproducir sus contenidos en otros medios sin copiarlos, lo que es tedioso e inaceptable para los buscadores.
Para competir con todas estas propuestas hay que afinar mucho la imaginación y sobre todo contar con una poderosa intuición sobre con qué se puede captar usuarios masivos.