La ciencia avanza, y nosotros retrasamos, es una sensación común, sin embargo, siempre hay hitos que vale la pena conocer, a pesar que ya parecemos fuera de escala para comprenderlos.
El conocimiento científico parece cada vez más de pocos.
Por eso es bueno compartir aquello que cada uno pudo conocer como novedad y trasmitirlo.
Uno de los males modernos, se dice, es la depresión, aunque algunos sostienen que es una enfermedad que siempre ha existido y que la globalización ha incrementado.
La depresión está considerada un trastorno cerebral, y se manifiesta no sólo en el comportamiento, sino también en una inflamación detectable en el cerebro. Es una respuesta inmune a estímulos de difícil diagnóstico, por eso, es difícil combatirla, el problema del diagnóstico es que los efectos se confunden con muchas otras enfermedades o asuntos de carácter personal como el mal humor, la somnolencia.
El adelanto importante es que ahora se pude detectar con mayor exactitud con herramientas que auscultan el cerebro, cosa que antes de ello era difícil de diagnosticar.
En el 2015 grupos científicos han encontrado nuevos métodos para diagnosticarlo y por lo tanto habrá novedades sobre cómo enfrentar la depresión, que su vez, comparte características con enfermedades como el Alzheimer o el autismo, con lo cual la detección temprana es importante.
Otro de los avances del 2015 es la situación de los drones, que ahora por iniciativa de la Aviación Federal estadounidense, decretó que los pilotos de drones, tendrán estatus de aviadores. Ello implica derechos y responsabilidades. La novedad no es poca cosa, implica cambios importantes, por ejemplo el de pasar el dispositivo a un nuevo estatus, dejando de ser un juguete, así la importancia que implica, cuyos objetivos dejó de ser inocentes para ser un medio de información de uso económico, político, militar, y de servicios, como los usados para testear el estado de los cultivos, o de espías con espectrómetros de masa para testear el estado exterior de edificios en detalles que no se pueden observar a distancia.
Se lo considera un pequeño avión no tripulado.
Algo que conmovió los cimientos de la antropología es el descubrimiento de una nueva especie humana. Se han encontrado fósiles que revolucionan la historia de los orígenes de la humanidad. En la universidad de Sudáfrica encontraron más de mil fósiles con características diferentes a las conocidas, al menos 15 individuos de una especie que se acerca a la humana y por ello se la considera dentro del grupo humano llamado H naledi, hallazgo que ha dejado más preguntas que respuestas.
En el año 2015 la revolución genética haría avanzar las ciencias médicas, se espera.
Las investigaciones en genéticas van delante de los análisis éticos, esto recién empieza, dicen algunos científicos.
Editar genes, es decir, configurarlos a gusto es una de las acciones que van de la mano del conocimiento del ADN. Editar genes fue la tecnología que más adelantó en el 2015; en pocos años las técnicas de manipulación ha comenzado a verse como una solución importante, utilizando el enfoque llamado CRISP-Cas9, que permite combinar edición de genes, las posibilidades parecen no tener horizonte, más rápido y mejor, según los científicos genetistas, en los laboratorios hay gran efervescencia, la edición de genes es una rama de la medicina que no sólo permitiría prevenir, sino también corregir los errores que la naturaleza le impone al cuerpo.
No son todo lo que el 2015 vió nacer, pero son aspectos científicos importantes que implican un comienzo o un cambio de paradigmas que de la mano de la tecnología reconvierte el futuro de la humanidad, en su pasado, presente y futuro.