Vos te quejabas de cómo te hablaba Cristina, y te molestaba su estampa, también te irritaban las cadenas nacionales y quizás las horas de discursos, con lo que intentaba que entendieras lo que era obvio que no querías oír.
Capaz ahora estés dispuesto a ver.
Es muy difícil comprender por qué una persona inteligente, por aspectos tan banales como las que no te gustaban de la presidenta podían dejarte ciego ante los logros.
Íbamos en camino de la desocupación, del control del abuso de las empresas, del derecho ciudadanos, de la conciliación social, de la recuperación de la educación, de la justa retribución al trabajo invisible, desde el de cartoneros hasta amas de casa.
Es inexplicable que no hayan sido razones suficientes para sanar una sociedad golpeada por la épocas oscuras del proceso, y luego por las políticas neoliberales que vaciaron el país, te embargaron el futuro, te obligaron a pagar cuentas de los poderosos, estatizando sus deudas de negocios, los mismos que se robaron tus ahorros y fugaron capitales en dólares, antes del CEPO; sacándote a vos tus dólares mientras ellos, en conocimiento de lo que pasaría, sacaron los propios.
Ahí están, esos son, los mismos que durante la dictadura te endeudaron, los mismos que durante la democracia, te robaron.
La única realidad es la del gráfico, mirala bien, porque tenés 4 años por delante de despojos, represión y lamentos por tu ingenuidad, votante macrista, vos lo metiste con tu voto, pero lo tendremos que pagar todos.