No es nuevo, desde que se declara “prócer” a los que hicieron algo por la patria, según definición de turno, pero que la historia se encarga de cuestionar, la construcción del héroe es un conjunto de factores de conveniencia según el sector que favorece.
Está claro que hay un solo discurso hegemónico que se encarga de socavar todo otro relato tiñéndolo de sospecha y acusándolo de lo mismo que pregonan, la construcción del héroe. Mientras desde el gobierno K procuraban, mediante cadena nacional, tener una sola voz, igual tergiversada hasta el infinito, desde el poder subrepticio de la prensa se construyen héroes con la voz de personas que no fueron perseguidas por ideología, pero sí por secretos que se fueron convirtiendo en mitos urbanos.
Nisman, un personaje ideal para acomodarlo a todos los posibles narrativos, nunca tan atinado el título de esta nota, émula de cuento de Borges.
Nisman era un personaje oscuro, usado por el poder, que aprovechó su ambición para sostener todo tipo de teorías conspirativas, la mayoría sin apoyo real, pero con suficiente ruido como para causar sospechas, que en la mayoría de los caso no fueron confirmada, salvo las pocas que terminaron en procesamiento.
Una de esas causas, la de escuchas ilegales por parte de Mauricio Macri, a la que la mayoría del público común, no le asigna mayor importancia que a la construcción del relato de su muerte.
Un funcionario que queda impune por un hecho grave, que sin embargo se minimiza por parte de la prensa, ignorándolo, tiene vía libre para cualquier otro delito; alguno, en alguna ocasión, tocará el nervio de la persona equivocada, y entonces nos asombraremos de la capacidad de construcción del héroe que involucra a los medios de prensa conocidos.
Hay muchas más razones que convienen a Mauricio Macri en la desparición de Nisman, pero con la ayuda suficiente de la prensa, convirtió el hecho en una causa contra Crsitina Kirchener, que por otra parte ni siquiera pudo probarse en un porcentaje mínimo, pues sólo la relación entre personajes, no prueba nada, los poderosos no eligen con quién relacionarse, tienen que gobernar para todos, nadie acusaría a Cristina de Neoliberal porque haya asistido a un evento al que también estuvo Macri, sin embargo, las infinitas relaciones en común con el fiscal sirvió de plataforma para usar la muerte de Nisman para señalarla, el asunto, sin pies ni cabeza, sigue dando qué hablar, a pocos les interesa encontrar en el perfil de Nisman su propio destino.
Nisman claramente usaba su posición para venderse al que pagara más, tenía cuentas poco claras, sin declara, recibía “honorario profesionales” de organizaciones por acciones que nunca quedaron claras, pero según lo actuado por Nisman, es de fácil deducción, llevaba una vida poco clara, que involucraba armas y organizaciones de investigación a las que llamó la atención por sus movimientos sospechosos.
Se lo tiene por la persona que quiso enfrentar a Cristina y pudo hacerlo, sosteniendo acusaciones sin fundamento, y se sabe que tuvo contactos potentes y recibió dinero importante por ello.
Pero estos datos no se publican en los medios de prensa importantes, sin embargo, subyace la idea de su homicidio, a pesar que hay muchas más razones desde el macrismo para hacerlo desaparecer, nadie habla de ello.
Mismo destino que otros discursos comprados como los de los hermanos Lanatta, será que hay que esperar a ver qué pasa, o terminan desapareciendo, en venta de su próxima fuga, o actúan con inteligencia y se salvan del destino Nisman, declarando.
No son los únicos, el poder de turno ha necesita callar muchas conciencias para estar ocupando el lugar que ocupan, sin embargo, cabe esperar que la ambición termine abriendo la brecha y alguien comience a cantar para que la construcción del héroe se revele, finalmente; si no, es probable que sea la evolución histórica la que encuentre el camino.