Hace un tiempo, la exigencia de los empresarios para el sitio era que fuera simple, término que contenía en sí, diversas interpretaciones, ninguna demasiado real.
Si se pedía precisión del término, lo más cercano era indicar otros adjetivos como cómodo, amigable, intuitivo, siendo muy difícil precisar estos términos ya que todos los toman como de sentido común.
En principio, si se pudiera llegar a un buen consenso de lo que estos términos implica en términos de diseño, lo próximo será, esperar que el público objetivo, los visitantes, estén de acuerdo con nuestra definición de esos términos.
La idea que subyace es que la interpretación de nuestra comodidad para navegar, nuestras manías, nuestra expectativa cuando enfrentamos un sitio es común a todos los usuarios que esperamos para el sitio.
La experiencia ha demostrado que la situación real de los sitios está lejos de encajar en esa descripción de un sitio Web, porque parte de una idea preconcebida que depende de unos cuantos factores, algunos tienen que ver con la experiencia propia de la edad, del rubro y producto, de la necesidad del producto, todos aspectos que analiza el marketing habitual, que no tiene que ver con el medio en el que propaga la difusión.
Todo hasta llegar al producto Web, sólo para advertir que hubo un paso importante en el medio en el que se debió pensar, antes que en las características ambiguas de intuitivo, amigable o cómodo, ello es el posicionamiento en buscadores.
De nada sirve tener un sitio hermoso que cumpla las condiciones satisfactoriamente si no lo encuentran al sitio. En el diseño de sitios, ya no hay inocencia en lo que se ve estéticamente o en contenidos convenientes, sino en presentar esos contenidos ante los buscadores de la manera adecuada, es ahí donde interviene el SEO posicionamiento, el profesional que interviene en el aspecto invisible al usuario, pero visible para los procesos de los buscadores.
Conseguir que el sitio funcione como una unidad de negocios implica prepararlo para dar respuesta a todos los interlocutores, el buscador, principalmente, conseguir que la interpretación de contenidos sea adecuada para presentar batalla frente a la competencia y superarla, esa situación conlleva llegar al usuario que potencialmente se convertirá en cliente, y la atención de las necesidades de ese cliente, donde los valores de comodidad e intuición son parte de una ecuación que cuya información se recaba a partir de la participación de ese usuario.
Recogiendo información de las preferencias del cliente una vez dentro del sitio, es el modo en que se detectan los factores, ahora reales, de amigable, comodidad e intuición; el comenzar con esos conceptos creyendo que nuestros criterios son válidos para medir aspectos de origen masivo es perder un importante valor a la hora de la creación de una unidad de negocio: el tiempo.
Para invertir en un sitio Web que se espera se convierta en una unidad de negocios, hay que analizar los factores que desembocarían en esa situación y también analizar los efectos que causará, para ello, en el medio hay que apoyar la estrategia con controles y mediciones que permitan comprobar las hipótesis de diseño y proveer elementos y criterios para rectificar el rumbo.
Muchas empresas que comienzan a introducirse en el mundo que propone la Internet, ya insoslayable, toma decisiones con insuficiente conocimiento y unas pocas acciones aisladas entre sí, como es el ejemplo de la atención a las redes sociales que se disocia de la acciones en el propios sitio.
Si se pudiera elaborar una receta para convertir un sitio en una unidad de negocio, desde Datagestion, que se dedica al proyecto de sitios webs desde el punto de vista de unidad de negocios propone los siguientes pasos:
1. Investigación en el rubro de las condiciones que llevó a la competencia a conseguir el posicionamiento privilegiado. Esto es de aproximadamente un mes de medición, hasta tener datos medidos.
2. Según los resultados de la investigación, proveer al sitio de las condiciones para alcanzar y superar las acciones de la competencia. Esto implica detalles de programación y recursos que el sitio deberá proveer para avanzar en la superación de las técnicas de la competencia.
3. Incluir herramientas de control de las acciones que se destinaron a la medición del efecto del posicionamiento.
4. Ejecutar las condiciones establecidas como estrategias para el posicionamiento.
5. Medición del impacto en términos de la relación consulta/clientes.
Esto es más fácil escribirlo que llevarlo a cabo, ya que la interrelación entre profesionales es uno de los factores que complica la relación cliente, diseñador.
El empresario debe advertir que el profesional diseñador, programador, Webmaster usualmente no cuenta con los conocimientos o el seguimiento de los cambios de rumbo de los buscadores, el SEO posicionamiento es una actividad constante, aún cuando el sitio ya está diseñado, de manera que las estrategias deben ser lo suficientemente flexibles como para sostenerse a través del tiempo, aún con sitio de tecnología obsoleta.
Para esto último, lo mejor es tener ejemplo de tales situaciones que se pueden comprobar.
Desde DataGestion, podemos dar acabados ejemplos, nos ocupamos del diseño y posicionamientos de sitios.
Ejemplos, con “literatura latinoamericana”, el sitio www.metalitertura.com.ar activo desde 2005.
Entre otros ejemplos, en los que la experiencia es importante, principalmente cuando se realizan con estrategias a contramano del resto de las empresas de posicionamiento, pues cuando todas hacen lo mismo, ninguna destaca, en DataGestion contamos con herramientas propias de control y con estrategias marcadamente diferentes de las competidoras, con el aprovechamiento del valor más importante, el tiempo; incluyendo a integración de los canales de comunicación, las redes sociales.