Las prácticas SEO, Search Engine Optimization, están apuntadas a facilitar la intervención en el sitio de los robots de Google, que clasificarán el sitio.
Se puede elegir ignorarlo, pero entonces el sitio estará condenado al mero sentido de ser un sitio de esos que se arman para “estar”, que es diferente de existir.
Si querés tener éxito en Internet, necesitas acomodarte a reglas prácticas, la más importante es que Google perciba el sitio, primero, después, que lo considere mejor respecto a tu competencia.
Hay dos formas de ascender en la posición, que tu sitio sea mejor a los ojos de Google, que tu competencia sea peor.
Google no sólo busca clasificar el sitio, sino que busca transgresiones, es tan importante saber lo que no debés hacer como lo que sí debés hacer.
Lo único imposible es ignorarlo.
Hay muchas estrategias, pero se empieza por tener un sitio que no boicotee el proceso, primero, luego si es neutro no está mal, pero es un desatino tomarse el trabajo de diseñar un sitio para no aprovecharlo.
Lo más importante es comprender qué influencia tiene la portada, la primera página, mientras la mayoría se ocupa de darle un “aspecto profesional”, característica subjetiva que va de la mano de modas, los que conocen la importancia del SEO se preocupan por adosarle características importantes para Google.
El conocimiento de estas breves técnicas, asegura una situación: si lográs que esta estrategia sea mejor que la de tu competencia, la carrera por el posicionamiento Web es más probable.
En primer lugar, en términos cuantificables, esto es la cantidad de espacio con contenido clasificable de la portada, debe ser superior al material no clasificable. Esto refiere a imágenes, tamaño de botones, tamaño de descripciones, marquesinas (textos que se desplazan), fotos que se desplazan.
El tratamiento que se realiza sobre el sitio, bajo esta óptica es el trabajo de optimización para buscadores y usualmente es un proceso que se planea antes del diseño de sitios.
Hay un tipo de diseño que incurre en todos los errores respecto a estas normas, so lo del tipo Bootstrap, que con la idea de ser responsives, exageran la técnica y descontextualizan el sentido de la proporción, solucionan con enormes botones, imágenes, flip de fotos y cosa llamativas el sentido de la primera página, creyendo orientarla hacia el usuario y estar en “onda” con la tendencia de diseñar sitios, tomándolo como “actualizados”.
En principio, y volviendo a las características, esos sitios incurren en todos los errores: botones, imágenes, uso excesivo de espacio son frases estrechas, clishés, y el peor error: iguales a miles de sitios, por los que además de no ofrecer información útil para clasificarlo está adocenado en diseño y a Google le resulta totalmente indiferenciable de cualquier otro sitio con los mismos elementos, ni hablar en la comparación con la competencia, que con muy poco, ahora puede superar semejante desierto semántico.
El dueño del sitio, bajo el hipnótico discurso que de ese modo está “accesible” a ser visto desde celulares, la solución es perfecta, sin advertir que antes de verse en un celular el usuario debe encontrar el sitio, que ahora tiene todas las condiciones de ser ignorados completamente.
La portada no sólo se hace para los usuarios, sino para la primer impresión que Google se llevará de cómo clasificar el sitio, si lo encuentra poco productos de datos, espaciará sus visitas hasta cesarlas completamente, bajándole la posición, ayudando con este acto a los que vienen detrás.
Por ello que antes del diseño del sitio hay que tener en claro que las consecuencias de esta clase de decisiones determinará el éxito o el fracaso del sitio.
La portada, debe informar al usuario, pero no exagerar y mucho menos obligar al usuario a transitar enormes páginas para favorecer la vista de los dispositivos celulares.
Es por esta clase de cosas que antes del diseño, hay que hacer una investigación, podrías estar diseñando un sitio para celulares con pocas probabilidades de uso en ese dispositivo, las estadísticas indican, por el momento al menos que los usuarios consultan por celular pero concretan compras por PC, sacrificar un sitio con una portada que no da información a Google, hace poco probable que en la consulta por celular una página en esas condiciones se ofrezca entre los resultados.
La solución es prosaica, con un sitio que detecte desde cuál dispositivo se hace la consulta y redirija a una página si se ve en PC a otra si es desde celular, el problema estarían solucionado.
Las reglas más sencilla para diseñar una portada es tener en cuenta que la información, tanto a Google como al usuario debería se exhaustiva, en texto y dejar las frases hechas y clishés de lado, Google no la podría diferenciar de otra con las mismas frases o parecidas.
La investigación de las palabras adecuadas de establecer estos mensajes tiene que ver con la tendencia de búsquedas de los usuarios, esa información se encuentra en el propio Google y se pueden encontrar con herramientas de análisis de tendencias para lo cual las redes sociales son la mejor opción.
Con cualquier técnica que se use, una portada correctamente informativa, no sólo para el usuario, sino para Google garantiza un paso delante de la competencia, y por supuesto para saber esto, también hay que investigar cómo resolvió la competencia esa consulta.
Muchos caen en el error de creer que “competencia” es la que suponemos, por ejemplo, si vendiéramos una gaseosas, por decir un producto conocido, tendemos a pensar que las competencia son las marcas ya conocidas, pero no es así, la competencia es escribir esa palabra en Google y ver quién aparece allí, en las 3 primeras páginas.
Si se toman el trabajo de probar este ejemplo, se podrá comprobar que ninguna de las marcas supuestas aparece.
De todos modos, y antes de probar con una palabra, como en el caso, “gaseosas”, hay que tener criterios para saber si una palabras es palabra clave, es decir, si hay alguna probabilidad de que los usuarios la usen para buscar nuestro producto, por ello, y nuevamente antes del diseño del sitio, se investiga cuáles son estas palabras que conviene colocar en nuestro sitio para atraer el interés de Google y colocar nuestro producto en la carrera de las preferencias de su resultados.
Método y experiencia allanan en camino del éxito, una cosa es segura: no se da de casualidad.
