Se puede hablar de campos matemáticos dentro del concepto de arte, y de todos; uno de los artistas emblemáticos el arte geométrico, es Escher, que ha hipnotizado con sus perspectivas rozáticas e interminables, llevando el plano de cinta de Moebius a todo tipo de superficies, confundiendo con exquisitos teoremas matemáticos la visión del espacio.
Las formas puras que involucra la geometría, es en sí misma, una forma de arte, ya desde la popularidad de los fractales, como elementos artísticos, las propuestas geométricas no dejan de aparecer entre las preferencias de los artistas plásticos.
La perfección de la matemática involucra, sin dudas el arte, ir más allá de las formas, involucra un concepto muy propio de cualquier ciencia, también del arte.
La abstracción geométrica tiene un claro representante en artistas como Wassily Kandinsky, Mondrian, Malecivh; destacados geómetras que involucraron en las formas, los colores puros, los primarios, como modelo constructivo que proponía una arquitectura de relación entre planos, con una armonía en la precisión matemática.
Sin dejar de lado la realidad, las propuestas con elementos de líneas, ángulos, triángulos, círculos y las variedades de formas que responden a fórmulas y ecuaciones, junto al desarrollo distintivo del color, ofreció una nueva perspectiva, diferenciándose notablemente de las corrientes de la época de producción de estos artistas.
Lejos de apartarlos, les ofreció una visibilidad atronadora que conmovió las teorías artísticas y las galerías y espacios donde exponían gozaron de un interés renovado.
La representación en sencillas construcciones geométricas, comenzó un camino que no dejaría de ser transitado hasta nuestros días.
Después aparecerían artistas que tomarían los mejor de los dos mundos, el figurativo, el abstracto, como fuente representativa de una realidad distinta.
Pensamientos y sensaciones, aparentemente no tangibles, que se construyen en la mirada del observador, no sólo revelan una estrategia nueva, sino que apelan a la relación entre el observador y el espacio, planos que construyen la experiencia del observador, que convierte en una perspectiva con significado personal.
La mente se desplaza por las imágenes encontrando un significado en 3 dimensiones, sin la prefiguración u orden real.
No tardaron en aparecer las formas onduladas, Braque y Picasso legaron importantes obras en los que los planos podían confundirse con diferencias de puntos del observador, desdibujando el hecho de que están representados en planos; formas y color que ya no podían dar cuenta de un punto en foco, sino de múltiples visuales de un mismo plano.
Hay discusiones sobre la realidad aparente o física de la eliminación de la perspectiva, o sobre el uso de colores y formas como torceduras espaciales, lo cierto es que la abstracción geométrica tuvo la suerte de convivir en la época de auge turístico, lo que hizo que la novedad se dispersara por el mundo, pareciendo, con el tiempo, que el arte abstracto geométrico había brotado simultáneamente en los distintos continentes.
Parte fundamental de las corrientes artísticas es el mecanismo de relación entre la interpretación, los grupos internacionales de discusión y la permanente búsqueda del sentido, la discusión del arte, siempre involucrará la definición de arte, lo que queda claro, es que los artistas cuentan con elementos de la geometría y dan cuenta de ellos, usándolos como constante inspiración, el arte abstracto geométrico está allí, sólo la sensibilidad del observador le da derecho a tomar un lugar en el arte a secas.
En el mural que acompaña este articulo, podemos ver además de las formas geométricas, la increíble “humanidad” del mural en el que la veta parece acomodarse al modelo de prefiguración del ojo, la textura, da cuenta de una geometría fractal. Un deseo es una plegaria.
La artista, Silvia Albuixech, es una renombrada artista visual.
