Los que algunos ven como un retroceso en decisiones de la presidenta, al nacionalizar YPF, y los dichos, de Kicillof, sobre que en realidad la deuda es de Repsol para con el país, es una de las estrategias que el gobierno ve como para destrabar las relaciones crediticias con organismos internacionales.
Como es usual en cualquier país con economías en desbalance, la falta de crédito coopera con la inestabilidad, y no hay mucho espacio para el desarrollo de un país, ahogado en necesidades básicas insatisfechas.
Hay un lapso de aproximadamente 2 o 3 meses para el gobierno sobre si colocará o no deuda para reforzar la economía interna.
Argentina ha comprometido 5 millones de dólares para resarcir la expropiación de YPF, lo que algunos ven como justo, es sabido, y gracias a la exhaustiva comunicación de este gobierno, que no es más que el pago del peaje, en el sentido que los organismos que manejan el mundo económico, Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Fondo Monetario internacional (FMI) y el Club de París (CP), ven como un buen negocio, un colchón para la pérdida, en ese grupo, la explotación de un país, extrayendo recursos y someterlo con escases de combustible cuando quieren intervenir en la política interna, no es delito, mientras no ocurra en sus propios países, sino economía.
Lamentablemente el desequilibrio del mundo no está de la mano de la conciencia humana, el gobierno argentino tuvo que dar una señal de avenirse a condiciones.
En mi opinión, el pueblo argentino, ignorante y manipulado por medios que defienden intereses ajenos, parte del grupo tripartito, BID, CP y FMI, al que con sirven con toda su política de ataque el gobierno, no hacen más que mirar a corto plazo, y en vez de defender el futuro de sus hijos, se preocupan por el precio del tomate, que ya se sabe que está inflado por los mismo poderes para, justamente, generar descontento.
Intelectuales y artistas, gente formada que comprende el proceso, apoyan incondicionalmente las decisiones del estado porque logran inferir sus resultados, no se quejan por los asuntos del dólar-dolor, apoyan con no comprar en las empresas que boicotean, no consumen los medios que forman las estrategias de boicot, pero son los menos, y la fuerza de la economía se impone en su poder.
Argentina tiene ahora que recorrer los circuitos de connivencia con los mismos que generan la miseria, para nuevamente, obligados ahora por la presión social que no comprende el proceso, a recurrir a nuevas deudas.
Ninguna de las acciones que intentó la presidenta ofreció el impacto suficiente como para que la población se preguntara y decidiera dejar de pensar en los que aprovechan el rio revuelto y apoyar, con la abstención el cuidado y la protección de productos internos, así como sociales.
Intentó que el campo pagara por exportar, porque al descuidar el consumo interno el gobierno tuvo que adquirir en el exterior lo que perfectamente cubría, si no fuera el negociado que armaron con vender a países extranjeros, que a su vez vendía a Argentina lo mismo que había salido de ella, ahora a precios astronómicos con el plus de los intermediarios para volver legal una actividad por las que en los países que la usan habría mucha gente presa.
Y fue un detonante, el que hizo tapar los oídos y la capacidad de razonar del pueblo, dijeron no a Cristina y eso nos trajo al momento actual.
El lunes 17 de Marzo, el gobierno tiene cita con el Club de París, el propósito es reformular la deuda de 10 mil millones de dólares. Los países acreedores tienen que acordar. La señal de que Argentina paga, ya se lanzó, una bengala de 5 mil millones para Repsol, una empresa cuyos directivos estarían presos en los países que ahora miran con benevolencia la decisión de Argentina.
El plazo a renegociar, 10 años, quedará para la administración que siga en el 2015. Mientras este gobierno ha tratado de salvaguardar a la población en general, a los más necesitados en particular del pago de estas rapiñas, un gobierno diferente ¿qué hará?
Se dice que el CP exigiría títulos públicos, lo que podría significar que mientras el país se hace cargo de las empresas y sus deudas, saneamiento y subsidios, los dueños de los beneficios serían el CP, entre otros.
Loa cuerdos con la deuda de Argentina con Japón y Alemania, con intervención del FMI, no hace falta explica mucho más, ya conocemos, tristemente, las condiciones de ese organismo y prácticas de ese organismo, son las mismas que nos tienen apretados económicamente desde la época militar. Entre sus condiciones: revisar las cuentas internas del país y tomar decisiones al respecto.
Luego, en la Asamblea Anual del BID, entre el 27 y 30 de marzo, en Brasil, Salvador Bahía, lugar paradisíaco que no atenuará la situación de tener que renegociar, aunque este es el único organismo que mantuvo créditos abiertos disponibles para Argentina, no por buenos, sino que cuando hay monopolio en actividades económicas hay abusos ineludibles.
La reunión con el FMI, entre el 11 y 13 de abril, tiene en agenda en análisis de la inflación; tengo un Dejavu, la última vez que supimos de ese tipo de reuniones, se destruyó la industria interna y tuvimos que conformarnos con productos chinos con calidad cero.
Y esto tendrá un último mal trago cuando el 21 de abril usen el último recurso para apelar ante los jueces de la Corte Suprema, que se tome en cuenta el caso de los Fondos Buitres, según un dedo hacia arriba o hacia abajo, los fondos del Banco Nación serán embargados o no.
Todo esto, mientras nos apalean todos los días con la información de la huelga de maestros, de los chicos sin escuela, y del delincuente procesado Macri, sin preocupación por ninguna de las situaciones, como siempre, como cuando se negaba a tomar la responsabilidad por los subtes, que no hay mejorado para nada.
Pregunta: las cuentas de Macri, ¿están claras?
Para los que tienen miedo que Cristina quiera quedarse y haga cosas como reformar la constitución, ustedes si fueran ellas, con todo este panorama ¿querrían quedarse?
Ella ya pasó a la historia, a la grande, primera mujer presidente elegida dos veces, enfrentó a todos los poderes, a países que la tiene fácil para sojuzgar a otros países, enfrentó todo tipo de boicots y saldrá entera, ¿alguien me puede explicar cuál conquista cree que le queda para no desear irse?
Le tienen miedo, pero sobre todo envidia. Ella ya está hecha, al que venga, lo quiero ver superar eso o tan solo sostenerlo.