En las bodas hay pocas concesiones a los dictados de la moda, pero una de las más importantes es para los ramos. Pocas cosas cambian en una ceremonia de boda tradicional, pero los ramos sí. Antes, las rosas y las orquídeas se llevaban la medalla de oro. Se colocaban en cascada, con partes colgando, o en forma de bouquet, pequeños y redonditos. Ahora estos ramos que se llevan en las Bodas Gijón quedan para las novias más clásicas pero las que pretendan innovar pueden seguir los nuevos estilos de que llegan desde Europa.

Las nuevas tendencias son muy variadas. Algunos apuestan por ramos muy elaborados, como montarlos sobre una estructura vegetal, como el bambú o incluso metálica. En ellos, se mezclan las orquídeas con flores pequeñas, ramas o, incluso, frutos y joyas. Otros, sin embargo, apuestan por ramos elaborados, pero poco cargados, para dar elegancia y personalidad a la novia. Para después del día más importante os recomendamos dormir en hoteles entre Oviedo y Gijón.

4 puntos a tener en cuenta para elegir tu ramo ideal

Hay cuatro tipos de ramos: el de brazo, de caída suave, de cascada y el redondo. Según la época del año será diferente. Por ejemplo, en mayo conviene tener flores coloridas en tonos fríos. Cada flor aporta un significado. Así, las rosas significan amor eterno y valentía; los tulipanes respeto y fidelidad; las margaritas inocencia y pureza; la orquídea es el símbolo de la belleza; y los claveles distinción y nobleza. La combinación de colores y flores es importante porque, por ejemplo, las flores amarillas van bien con ramos puntiagudos y los azules van mejor con un ramo redondo. Sitios y lugares para bodas en Gijón

Un ramo para cada novia. Dime cómo eres y te diré cuál es tu ramo.

Impulsivas y apasionadas. Ramo grande con flores llamativas, primando el color rojo unido a tonos violetas. Tranquila y hogareña. Ramo sencillo con flores campestres y colores sutiles como rosas, margaritas y alhelíes. Maternal y tenaz. Flores no muy llamativas de corte oriental. Serán buenas las flores delicadas como las rosas blancas. Exuberante y sensual. Flores grandes, rosas y rojas mezcladas con hojas de crotos. Detallista, amorosa y modesta. Bodas Palacio de los Figaredo

Con forma de bouquet y flores pequeñas como alhelíes, margaritas y hojas lisas de color suave. Elegante y equilibrada. Rosas, violetas…, irán muy bien los encajes. Magnética y misteriosa. Orquídeas y violetas mezcladas con flores silvestres que le den un toque mágico.  Directa, activa y afectiva. Flores blancas, jazmines y nardos atados con seda. Debe ser un ramo sencillo y de un tamaño medio. Trabajadora e intuitiva. Un ramo grande, muy elaborado con flores exóticas. Creativas e independientes. Debe evitar los ramos clásicos y apostar por la vanguardia, con flores exóticas y alguna que sea extraña.